- Para la masa, poner los ingredientes en la procesadora y funcionando, incorporarle el agua necesaria para conseguir una pasta unida y gomosa.
- Tomar la masa y terminar de unirla con un poco más de harina, presionándola hacia abajo y golpeándola hacia abajo suavemente contra la mesada.
- Una vez bien tierna, dejar descansar la masa tapada y a temperatura ambiente como mínimo por media hora, y luego estirar con palote.
- Ya estirada, seguir afinando la masa con el dorso de las manos, usando su propio peso pero sin llegar a romperla.
- Una vez que está bien fina, ponerla sobre un repasador para que en contacto con la tela no se contraiga y se pueda estirar aún más.
- Si se rompe, simplemente volver a pegarla.
- Cuando esté casi transparente, untar toda la superficie con aceite para hojaldrar la masa.
- Poner sobre uno de los bordes un cordón de relleno bien compacto y estirando cuidadosamente la masa sobre él, taparlo de borde a borde.
- Con la ayuda del repasador, enrollar dando varias vueltas, cortar lo que sobre de masa y poner los rollos en una placa de horno.
- Con el canto enharinado de un cuchillo marcar las porciones.
- Pintar con huevo.
- Hornear en horno moderado.